Seguro que, en algún momento, has sentido la necesidad de contar con una hoja de ruta que te oriente hacia tus metas profesionales. El feedback constructivo puede convertirse en esa brújula que ayude a dirigirte hacia el aprendizaje continuo y el crecimiento profesional, a través del reflejo de tu desempeño, desde una perspectiva externa.
En este artículo, brindamos herramientas para ayudarte a integrar el feedback constructivo y potenciar tu desarrollo profesional; dominando el arte de dar retroalimentación, aprendiendo a recibirla y, sobre todo, aprovechándola para la mejora y el crecimiento constante.
¿Qué es el feedback constructivo?
Es una forma de retroalimentación, enfocada en identificar fortalezas y oportunidades de crecimiento en una persona, con el objetivo de ayudarla a potenciar su desempeño y habilidades profesionales.
Es una estrategia esencial en cualquier ámbito: personal, profesional, corporativo, incluso académico. Podemos dar o recibir feedback constructivo de nuestros compañeros de trabajo, coach, colaboradores, líderes, mánager, clientes, grupos de estudio, entre otros.
Pero, ¿cuál es la diferencia entre el feedback constructivo y una crítica u opinión?
Más allá de la forma respetuosa de abordar el tema, la principal diferencia radica en el propósito constructivo de la retroalimentación. No sólo se enfoca en identificar los puntos a corregir o mejorar, sino que sugiere soluciones, alternativas y estrategias para lograrlo, transformando los retos en oportunidades de aprendizaje.
El feedback corrige al mismo tiempo que ofrece alternativas, transformando los retos en oportunidades de crecimiento
¿Cuáles son sus beneficios?
El feedback constructivo forma parte de la comunicación efectiva y en el ámbito profesional, favorece los siguientes aspectos:
- Desarrollo de habilidades: al recibir retroalimentación podemos identificar dónde somos más fuertes y dónde podemos mejorar.
Trabajar nuestras debilidades nos permite desarrollar nuevas competencias, perfeccionar las habilidades actuales y hacernos más hábiles en el desempeño
- Mejora del rendimiento: al comprender con claridad el desempeño laboral, centrándonos en las fortalezas y descubriendo aquellas áreas en las que se puede mejorar, es posible enfocar los esfuerzos de manera más efectiva, ayudando a incrementar la eficiencia laboral, la productividad y el desempeño en general.
- Crecimiento: el feedback constructivo impulsa el progreso profesional al brindar una guía sobre lo que se está haciendo bien y lo que se necesita cambiar para avanzar.
El feedback permite alinear la trayectoria profesional con los objetivos del ámbito de trabajo y avanzar hacia logros significativos
- Motivación: de igual manera, al valorar el esfuerzo de las personas se incrementa su motivación y compromiso, y al dar y recibir feedback constructivo, de forma regular, se promueve la comunicación abierta y honesta y se fortalecen las relaciones interpersonales.
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Características del feedback positivo y útil al receptor
No toda retroalimentación es efectiva, ni impulsa el crecimiento. Por ello es necesario que cumpla con las siguientes particularidades:
- Precisión. Debe ser claro y específico para que realmente sea útil al receptor y le permita saber exactamente cuál es el comportamiento que debe mantener o modificar.
En lugar de hacer un comentario general como: “Necesitas mejorar”, indicaremos el aspecto específico que requiere atención: “Entiendo que eres una persona independiente, pero podrías integrarte en el equipo”
- Dirigido a accionar. Su objetivo es generar un cambio positivo, por lo que debe enfocarse en brindar al receptor acciones concretas. Un ejemplo podría ser: “Gestionas el tiempo de manera impresionante, pero me agradaría que fueses más detallista y te tomaras 20 minutos para revisar con detenimiento el informe, antes de entregarlo”.
- Balance entre lo positivo y aquello que se debe mejorar. El feedback constructivo no inclina la balanza hacia los aspectos a mejorar, sino que busca un equilibrio entre alabar e increpar. Esto permite mantener la motivación de quien recibe el mensaje, al notar que sus esfuerzos son apreciados, mientras se le brinda una orientación clara para continuar mejorando.
Debemos buscar el equilibrio entre alabar e increpar
- Empatía. “No es lo que dices, sino cómo lo dices”. Esta popular frase refleja con exactitud la importancia de saber comunicarse al dar retroalimentación; utilizando las palabras adecuadas y el tono apropiado.
La empatía es esencial para que el receptor se sienta apoyado, en lugar de atacado y el feedback sea realmente efectivo
- Sin dudas. El mensaje principal debe quedar claro y entendible al receptor, de manera que pueda asimilarlo y actuar al respecto.
Es importante evitar el uso de términos confusos o ambiguos
Estrategias para entregar retroalimentación constructiva
Una de las condiciones para que el feedback sea provechoso y no se confunda con un simple comentario u observación, es que se estructure previamente, atendiendo los siguientes aspectos:
- Preparar con anticipación. Se requiere estar bien informado sobre los aspectos del desempeño del receptor que se van a tratar, antes de dar retroalimentación. También se debe precisar qué se va a decir y cómo se va a decir.
- Elegir un buen momento. La selección del instante y el lugar para dar feedback es muy importante para no incrementar la tensión. El espacio debe ser tranquilo y privado, sin interrupciones.
Tanto el receptor como el emisor deben estar lo más relajados posible y tener tiempo suficiente para conversar
- Iniciar con lo positivo. Es crucial destacar las fortalezas en el desempeño del receptor, así como sus habilidades y logros para comenzar el feedback. Esto permite crear un ambiente positivo y ayuda a mejorar la disposición de la persona para escuchar un comentario crítico.
Se debe empezar destacando las fortalezas, habilidades y logros
- Ser específico. Se debe explicar al receptor, de forma clara y precisa, la situación específica que se quiere mejorar, evitando las suposiciones o los juicios de valor.
En lugar de decir: “Tu desempeño no es bueno”, diremos: “En este informe, tu trabajo no cumplió con los objetivos esperados”
- Tono constructivo. El enfoque debe estar en el comportamiento del receptor, no en la persona, de manera que no se interprete como una crítica personal, sino como una oportunidad para que mejore su desempeño.
Nos enfocamos en la conducta o desempeño, no en la persona
- Escuchar. Es importante escuchar con atención la respuesta del receptor y tratar de entender su punto de vista.
- Brindar sugerencias. Es crucial ofrecer al receptor posibles soluciones. Se puede, por ejemplo, diseñar un plan de acción con la persona, estableciendo objetivos claros y realistas y definiendo un plazo para su cumplimiento.
Debemos ofrecer soluciones
- Hacer seguimiento. Darle seguimiento al progreso del receptor es esencial. Se pueden establecer reuniones periódicas, con el objeto de verificar que esas sugerencias van a ayudar a mejorar el rendimiento de la persona.
¿Cómo puedes aprender a recibirlo?
No siempre se está preparado para las conversaciones incómodas que brindan retroalimentación. Te ofrecemos algunas herramientas para lograrlo y desarrollar esta habilidad:
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- Prestar atención
Aunque quizás te brinden consejos no solicitados, es importante tener una actitud abierta y escuchar con atención el feedback, porque siempre trae consigo un aprendizaje.
- Preguntar
Solicitar al interlocutor ejemplos que te ayuden a aclarar lo planteado para que no existan dudas y el feedback pueda ser realmente efectivo. También debes comprender el impacto de tu desempeño en el equipo de trabajo o en las personas involucradas e intentar visualizar el planteamiento desde su perspectiva.
- Agradecer
La crítica suele ser todo un desafío, pero dar las gracias a la persona que ofrece el feedback denota disposición para progresar y una mentalidad de crecimiento.
- Reflexionar
No restes importancia a la información que están compartiendo contigo, por el contrario, reflexiona y trata de identificar, con la mayor objetividad posible, qué comportamientos tuviste que pudieron afectar a otros.
- No tomarlo personal
El feedback es una oportunidad de mejora y crecimiento, por lo que es importante no tomarlo de modo personal.
- Comunicar tu plan de acción
El feedback es efectivo cuando impulsa a la acción, por ello, una vez recibido, es fundamental establecer acciones específicas y tiempo de ejecución, además de dar seguimiento al plan al que te comprometiste y observar los resultados obtenidos.
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Dos técnicas que te pueden ayudar a dar feedback
Método del sándwich
Es una técnica que consiste en combinar comentarios positivos y áreas de mejora, distribuidos en tres capas. La primera, iniciar con un comentario positivo o reconocimiento (ayuda a preparar al receptor y crear un ambiente positivo). La capa intermedia, introducir aquellas áreas que requieren mejoras o aspectos a corregir (es imprescindible ser claro y específico y orientado a la acción). La tercera capa, cerrar con otro comentario positivo o palabras de aliento que fortalezcan la confianza del receptor.
Método STAR: Situación, Tarea, Acción, Resultado
Es una técnica para estructurar el feedback de manera clara y comprensible, desglosándolo en cuatro elementos:
- Situación: consiste en describir el contexto en el que ocurrió el comportamiento a discutir.
- Tarea: es explicar al receptor la misión o tarea específica que estaba enfrentando.
- Acción: consiste en detallar las acciones tomadas por la persona en esa situación.
- Resultado: se basa en comunicar el resultado de esas acciones y su impacto en el equipo, tarea o personas involucradas.
Conclusión
El feedback constructivo es una herramienta poderosa para el crecimiento profesional y cuando se hace con respeto y empatía, puede tener un impacto positivo y duradero en la vida de los demás. Permite mejorar el desempeño, incrementar la productividad y lograr las metas profesionales.
De la misma forma, al dar este tipo de retroalimentación, con efectividad y regularidad, es posible transformar la cultura corporativa, ayudando a crear un ambiente de trabajo positivo y colaborativo y a construir relaciones sólidas con los compañeros, colaboradores, líderes, mánager, entre otros.
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Bibliografía:
Desarrollo Personal. (23 de enero de 2024). FEEDBACK CONSTRUCTIVO, ¿Cómo dar y recibir retroalimentación de manera efectiva? [Archivo de Vídeo]. Youtube. https://www.youtube.com/watch?v=ubbOGGN-Tu8
Quintanilla, M. y Maldonado, M. (2020) Feedback una herramienta que empodera y motiva al colaborador dentro de la organización. Universidad de San Carlos de Guatemala. http://www.repositorio.usac.edu.gt/id/eprint/17794