Disciplina positiva: cómo educar para la vida sin gritos ni castigos

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La disciplina es útil en diferentes áreas de la vida: educativa, laboral, deportiva y nos ayuda a tener constancia y alcanzar objetivos a largo plazo.

No obstante, la palabra ‘disciplina’ puede generar cierta incomodidad, tener connotaciones negativas y asociarse con gritos, castigos y humillaciones. Pero, ¿y si te contamos que existe una forma distinta de educar?

A continuación, veremos cómo podemos cambiar los gritos y castigos por soluciones, a través de la disciplina positiva.

 

¿Qué es la disciplina positiva?

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La disciplina positiva es una metodología educativa y de crianza que permite a los padres, cuidadores y docentes, corregir el comportamiento de los niños, niñas y adolescentes, cambiando los castigos físicos y psicológicos, por el equilibrio entre la amabilidad, la firmeza y el respeto.

Este programa fue creado en 1988, por la psicóloga y educadora Jane Nelsen, junto a la psicoterapeuta Lynn Lott, a partir de la teoría social de Alfred Adler y Rudolf Dreikurs, dos psiquiatras austríacos.

 


La educación positiva sustituye el miedo de los modelos de crianza autoritarios por el amor, el acompañamiento y la comunicación efectiva


 

Y busca construir una relación sólida y sana entre padres e hijos, docentes-alumnos, reconociendo a los niños y adolescentes como personas inteligentes, capaces y sensibles.

La educación positiva trabaja en reforzar el comportamiento deseado, planteando soluciones, en lugar del castigo; a la vez que enseña a los niños y jóvenes a manejar sus emociones y sentirse bien con ellas, ayudándoles a desarrollarse de forma positiva.

 

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¿Es sinónimo de ser permisivos?

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La crianza respetuosa no es permisiva, ni mucho menos sumisa. Recurre a la amabilidad y la firmeza como estrategias para establecer límites y reconducir comportamientos, sin enfocarse en el castigo.

Sin embargo, en ocasiones, la amabilidad tiende a confundirse con el hecho de que el niño haga lo que le apetezca, en un entorno de tolerancia excesiva y ausencia de normas, pero nada más alejado de la realidad.

La amabilidad en este contexto significa orientar y guiar a los niños y jóvenes, incluso teniendo que decirles, a veces, “NO”, pero respetando su dignidad.

De igual manera, las normas o límites deben establecerse de forma clara, suficiente y precisa, ajustados a la edad evolutiva del pequeño o del adolescente a los que se dirigen.

 


El objetivo es enseñarles competencias básicas para la vida


 

Por ejemplo, ante una situación cotidiana como la negativa del niño a ducharse, se puede aplicar la amabilidad y la firmeza diciéndole: “Llegó el momento del baño, ¿quieres jugar con el pato o con el pulpo?, en lugar de gritarle: “¡Vente al baño ahora! o te quito los videojuegos”.

 

¿Cuáles son los principios de la disciplina positiva?

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Conexión antes que corrección

Para la crianza positiva es necesario que se establezca una conexión entre el niño o el joven y su entorno: familia, comunidad, escuela, de manera que se sienta valorado, parte de algo o alguien y se involucre. Ese vínculo permite que el crío perciba la corrección como un error que debe subsanar, y no como un rechazo, además de motivarlo a cooperar.

 

Respeto mutuo

Implica el trato respetuoso entre padres e hijos por igual, pero también comprende el necesario respeto de los padres, madres y cuidadores hacia sí mismos, a sus necesidades y a las distintas situaciones que surgen dentro de la dinámica familiar. Así como tampoco debe faltar la amabilidad y el respeto hacia las necesidades del niño, niña y adolescente.

 

Consecuencias y no castigos

El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) enfatiza que la violencia no educa y derriba la autoestima de los niños. Por ello, la disciplina positiva se enfoca en la búsqueda de soluciones, en lugar de los castigos, así como en el aprendizaje de las consecuencias y responsabilidades que genera todo comportamiento, de forma consciente y no obediente como en la crianza punitiva clásica.

 


La violencia no educa, derriba la autoestima de los niños


 

Comunicación efectiva

Es la transmisión de información padre-hijo, docente- alumno, de forma clara y respetuosa. ¿Cómo se logra? A través de la paciencia, la empatía, la escucha activa, involucrando al niño o adolescente en la toma de algunas decisiones y minimizando las palabras y maximizando las acciones.

 


Se debe involucrar al niño/adolescente en las tomas de decisiones


 

Impulsar en lugar de alabar

La educación positiva sustituye el alabar a los niños o jóvenes (el foco solo está en el éxito), por alentar, porque toma en cuenta el esfuerzo y el progreso.

 


Alentar en lugar de alabar fortalece la autoestima y fomenta el desarrollo de un buen carácter


 

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Efectos a largo plazo

A diferencia del castigo, que utiliza el miedo para cumplir su objetivo a corto plazo, pero con el tiempo solo genera efectos negativos, la disciplina positiva, a largo plazo, robustece al niño o adolescente con una serie de habilidades sociales, emocionales y cognitivas para la vida, para el buen carácter.

Respeto, empatía, responsabilidad, sana autoestima, cooperación, capacidad para resolver problemas y sentirse seguros y estables para crecer, son algunas de las capacidades para el futuro que se adquieren mediante la crianza respetuosa.

 


Una crianza respetuosa invita a los pequeños a explorar su entorno y descubrir sus capacidades para utilizarlas de manera útil


 

Los errores son oportunidades

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Durante muchos años, la sociedad nos ha enseñado a sentir vergüenza por los errores o comportamientos inapropiados. Sin embargo, la crianza respetuosa cambia este enfoque y enseña a padres, cuidadores y críos a enfrentar la frustración, el fracaso y el error y verlos como oportunidades maravillosas para aprender. Esta competencia es esencial para una vida feliz

Jane Nelsen, en una entrevista para Entre Sneackers y Tacones destaca que los errores son parte de la vida y se debe enseñar a los pequeños a emocionarse con ellos y ser conscientes del aprendizaje que dejan.

 


“Es un alivio para los niños saber que no tienen que ser perfectos y entender que está bien cometer errores”


 

Su propuesta para abrazar los errores y recuperarse de ellos se basa en las 3R:

  1. Reconocer: “Cometí un error”.
  2. Reconciliar: “Discúlpame”.
  3. Resolver: “Trabajemos juntos en una solución”.

 

Lo que no debemos hacer

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La tarea de establecer límites amables y firmes no es nada fácil, es por ello que debemos estar atentos a estos errores que se cometen con mucha frecuencia y que perjudican la conexión con el pequeño:

  • Usar la amenaza como estrategia, pues debilita el vínculo con el educando y le resta fuerza al límite.
  • Establecer reglas sin conversar previamente con los niños o jóvenes, pues no podrán cumplir algo que desconocen y, mucho menos van a saber cómo hacerlo.
  • Poner límites sin antes explicar y acordar con los niños y, sobre todo con los adolescentes, las consecuencias de su incumplimiento.
  • Ceder ante la norma, le envía al niño o adolescente la señal de que cumplir límites no es tan importante.
  • Establecer límites poco realistas o que no se adaptan a la edad evolutiva del pequeño o a la situación.

 

Consejos para aplicar la disciplina positiva en casa

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Aplicar la disciplina positiva en el hogar es posible. La psicóloga infanto-juvenil Rebeca Gómez, en una entrevista para el Instituto Europeo de Psicología Positiva (2020) señala que, si bien la puesta en marcha de este modelo educativo requiere paciencia, esfuerzo y tiempo, a la larga la inversión vale la pena.

Aquí te dejamos algunos consejos útiles:

  • Cambiar el enfoque: Ya basta de poner el enfoque en lo que no se debe hacer. La atención debe ponerse en lo que el niño debe hacer.
  • Utilizar el refuerzo positivo: Es importante reconocer los comportamientos apropiados y la motivación para alcanzarlos.
  • Explicar las consecuencias: Es necesario aclarar al crío, de forma tranquila y realista, las consecuencias de sus acciones y hacer de estas conversaciones una práctica constante, es por ello que la comunicación asertiva es clave en este modelo de crianza.
  • Tiempo en familia: Es necesario establecer un tiempo dentro de la rutina familiar, por ejemplo, a la hora de la cena, para que todos conversen, comenten sus errores, lo que aprendieron de ellos y se feliciten. A su vez, estos instantes serán útiles para que los padres exploren, junto a los niños y jóvenes y los ayuden a pensar y buscar soluciones respetuosas.
  • Ser un modelo a seguir: Recordemos que los niños aprenden mejor por medio de la observación y la imitación, por lo que es importante ser un buen ejemplo.
  • Establecer acuerdos: al trabajar los límites como acuerdos, en los que los niños y jóvenes son tomados en cuenta y participan, se comprometen a cumplirlos.

 

 Conclusión

La disciplina positiva promueve una crianza amorosa y efectiva y mejora la dinámica familiar, contribuyendo también al bienestar emocional y al crecimiento integral de los niños y jóvenes. Al aplicar esta técnica, los padres fomentan la autonomía y la responsabilidad, preparando a sus hijos para enfrentar desafíos de manera respetuosa y efectiva.

 

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Bibliografía:

 Entre Sneackers y Tacones. (12 de julio 2021). «El comienzo de la Disciplina Positiva» con Jane Nelsen. [Archivo de Vídeo]. Youtube.  https://www.youtube.com/watch?v=7PX0YGOG0XI

 Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia. (s.f.). Crianza positiva: cómo disciplinar a tu hijo de manera inteligente y saludable. https://www.unicef.org/parenting/es/cuidado-infantil/crianza-positiva-como-disciplinar-tu-hijo-de-manera-inteligente-y-saludable

Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia. (s.f.). Prohibición del castigo corporal y trato humillante. https://www.unicef.org/mexico/prohibici%C3%B3n-del-castigo-corporal-y-trato-humillante

García Vega, L. (2020). Castigar no es educar. La Esfera de los Libros, S.L.

Hernández, E. (2021). Cómo poner límites amables y firmes a los niños – Disciplina positiva. Guía infantil. https://www.guiainfantil.com/educacion/limites/como-poner-limites-amables-y-firmes-a-los-ninos-disciplina-positiva/#:~:text=Tal%20y%20como%20lo%20entiende,y%20la%20falta%20de%20receptividad.

 Instituto Europeo de Psicología Positiva. (17 de enero 2020). Claves de la Disciplina Positiva: Podcast #42 – Practica la Psicología Positiva. [Archivo de Vídeo]. Youtube. https://www.youtube.com/watch?v=GNDDSPiOsSs

Revisado y aprobado por Fermín Carrillo, director de la Cátedra de Educación
Escrito por Yezair Silva

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