Según la Unesco existen más de 250 millones de estudiantes inscritos en instituciones de educación superior en el mundo. La cifra parece significativa y ha ido en aumento durante los últimos 20 años, principalmente gracias a la educación a distancia y el aprendizaje en línea, sin embargo, falta mucho por hacer, sobre todo si consideramos el incalculable valor de la educación superior en el desarrollo de las naciones. Es por ello que cada 26 de noviembre se celebra el Día Mundial del Acceso a la Educación Superior.
Sin duda, la formación terciaria tiene el poder de transformar vidas y comunidades enteras y, cuantas más personas puedan acceder a una educación superior de calidad, mayor será la posibilidad de edificar, ladrillo a ladrillo, una sociedad más justa y equitativa.
En iRG celebramos esta importante fecha, reafirmando nuestro compromiso en la promoción de espacios y oportunidades para la formación posuniversitaria y aprovechamos la ocasión para destacar el profundo impacto que tiene la educación superior, no sólo para el futuro profesional y la empleabilidad de quien la recibe, sino como impulsor en la construcción de un mundo mejor.
Según la UNESCO, en los últimos 20 años la matrícula en educación superior se ha duplicado, lo que refleja un mayor acceso y potencial para el desarrollo social y económico
Conoce el poder transformador de la educación superior a través de una historia de vida
Retrato de Tererai Trent
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Tererai Trent es una mujer nacida y criada en una aldea rural de Zimbabue, África. Desde joven tuvo la firme creencia de que la educación era la clave para salir de las cadenas de la pobreza y, junto a esta convicción, tenía 5 grandes sueños: estudiar fuera, terminar una carrera, un máster, un doctorado y retornar a casa y trabajar por sacar adelante a las mujeres de su comunidad.
A pesar de que las circunstancias no le eran favorables (carecía de educación, de recursos económicos, a los 18 años ya tenía 4 hijos y un esposo maltratador), Trent nunca se dio por vencida.
En el año 2001, tras mucho esfuerzo y sacrificio, logró titularse en Educación Agrícola en la Universidad de Oklahoma; tres años después obtuvo su maestría en Fitopatología y en 2009 obtuvo su doctorado en Evaluación Interdisciplinaria.
Su formación profesional no sólo le permitió cristalizar sus sueños y darle un giro a su vida, sino transformar la vida de muchos en su comunidad. Ese mismo año, fundó Tererai Trent International (TTI), una organización que, mediante alianzas estratégicas, ha logrado construir 11 instituciones educativas, beneficiando a más de 6000 niños en las comunidades rurales de Zimbabue. Su historia demuestra cuán trascendental es la formación superior.
La educación hace más que responder a un mundo cambiante: la educación transforma el mundo
7 aportes de la enseñanza superior
La educación universitaria y posuniversitaria es esencial para el desarrollo, tanto personal como social. Desde el punto de vista individual y profesional, bien sea a nivel de grado, máster o programas de doctorado, permite la expansión del conocimiento, así como tener una mejor comprensión de la comunidad y del mundo en general. Entre sus beneficios destacan:
1.Desarrollo de habilidades
Favorece el autodescubrimiento y el aprendizaje de nuevas formas de pensar.
Los estudiantes adquieren conocimientos teórico-prácticos que les permiten desarrollar habilidades duras, propias de la formación académica en su campo de estudio (análisis, uso de herramientas, competencia digital, lógica, matemáticas, entre otras), pero también adquieren habilidades blandas, altamente valoradas, como el pensamiento crítico, el trabajo en equipo, la comunicación oral y la resolución de problemas.
El desarrollo de habilidades duras y blandas garantiza que los egresados no solo sepan «hacer», sino también «pensar, comunicar y resolver», características esenciales en el profesional moderno
2.Ampliación de conocimientos
Permite a los estudiantes expandir sus conocimientos y habilidades, los cuales pueden ser utilizados ante cualquier desafío, así como dominar conceptos y teorías abstractas.
Prepara a los estudiantes para ser no solo ejecutores, sino también pensadores estratégicos capaces de liderar e innovar en un mundo en constante evolución
3.Mentalidad de aprendizaje continuo
El aprendizaje continuo es clave en un mundo donde la tecnología y las demandas laborales evolucionan rápidamente. Innovar y adaptarse no son habilidades innatas, sino hábitos que se desarrollan con la práctica constante de aprender, desaprender y reaprender, lo que convierte la educación superior en una herramienta indispensable para el éxito personal y profesional.
Fomenta el desarrollo de una mentalidad de aprendizaje continuo, habilidad necesaria para innovar y adaptarse a nuevas circunstancias
4. Redes de contactos
Posibilita a los estudiantes crear una red de amigos, profesores, compañeros y profesionales que pueden ser decisivos a lo largo de su carrera y ayudar a abrir opciones a oportunidades laborales, sociedades y/o colaboraciones.
La educación superior es tanto una plataforma de aprendizaje como un ecosistema que abre puertas hacia un futuro lleno de posibilidades
5. Mejoras en el mercado laboral
La formación superior contribuye al crecimiento profesional y abre un abanico de oportunidades laborales, con posibilidades de acceso a puestos de trabajo bien remunerados y de mayor responsabilidad.
Tiene la capacidad para actuar como un motor de movilidad social y profesional
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6. Desarrollo personal
Permite a las personas perseguir sus pasiones y cumplir sus metas académicas y profesionales. A su vez, ofrece un entorno multicultural que facilita la interacción con personas de diferentes culturas y perspectivas, lo que fomenta la empatía, la tolerancia y el respeto hacia las diferencias.
Forma a individuos no solo preparados para sus carreras, sino también para contribuir positivamente a una sociedad diversa y plural
7. Contribución al avance social
Por ello, las personas con formación terciaria tienen más probabilidades de involucrarse en su comunidad (a través del voluntariado, la participación en proyectos comunitarios o la promoción de causas sociales) y contribuir al progreso cultural, científico y social. Ello impacta positivamente en la construcción de una sociedad más comprensiva, inclusiva y empática.
Tener una mejor comprensión del mundo fomenta un mayor sentido de pertenencia y participación social
¿Cómo favorece la educación superior al progreso de la sociedad?
Costa Rica es el país de LATAM con el mayor % de población con educación universitaria y está en el puesto 30 a nivel global.
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La formación terciaria no solo beneficia a los individuos que la reciben, sino que también tiene un impacto profundo y duradero en la sociedad en general, al proporcionar una fuerza laboral cualificada, promover la innovación, disminuir la pobreza y fomentar la igualdad.
La educación superior es un pilar esencial para el desarrollo económico, social y cultural de cualquier nación
Impacto económico
- Desarrollo de la economía: proporciona una fuerza laboral más productiva y cualificada, contribuyendo al crecimiento económico. Además, los egresados de educación superior usualmente tienen mayores ingresos y tasas de empleo, lo que impulsa el consumo y la inversión económica.
- Innovación y emprendimiento: las instituciones de formación superior son centros de investigación y desarrollo que generan nuevas ideas y tecnologías. Esto fomenta el emprendimiento y la creación de nuevas empresas, impulsando la competitividad y el progreso económico. Además, facilitan el abordaje de problemas sociales y económicos, mejorando la calidad de vida de las personas.
En las últimas décadas, Irlanda ha transformado su economía, pasando de ser una de las más rezagadas de Europa a una de las más prósperas. Este cambio se atribuye en gran medida a su inversión en educación superior y al desarrollo de una fuerza laboral altamente cualificada.
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Impacto social
- Contribuye al desarrollo de una sociedad próspera, comprensiva y empática, con crecimiento económico.
- Disminución de la pobreza: proporciona los conocimientos y las habilidades necesarias para acceder a mejores oportunidades laborales y, por ende, lograr una mejor calidad de vida. Por ello, se la considera una poderosa herramienta para salir de la pobreza, especialmente para los estudiantes de entornos vulnerables: migrantes, discapacitados, indígenas, habitantes de áreas rurales, entre otros.
- Igualdad de género: empodera a las mujeres con conocimientos y habilidades que les permiten participar plenamente en la economía y la sociedad, promoviendo la igualdad y a la vez disminuyendo la brecha de género en el empleo y los ingresos.
El programa W-STEM (Women in Science, Technology, Engineering, and Mathematics) ha contribuido a reducir la desigualdad de género en el acceso a la educación superior. Tiene como objetivo atraer, acceder y orientar a mujeres en la educación superior en carreras STEM en América Latina.
Impacto cultural y científico
- Intercambio de conocimientos: las instituciones de educación superior son espacios donde se intercambian ideas y saberes. Ello impulsa la diversidad cultural y el entendimiento mutuo entre diferentes naciones y comunidades.
- Investigación y desarrollo: la investigación es la base de la educación y permite generar nuevos conocimientos, nuevas tecnologías e información, sobre problemas complejos. Las universidades realizan investigaciones que no sólo pueden abordar problemas globales como la salud pública, el cambio climático y la sostenibilidad, sino que pueden impulsar el desarrollo de productos y servicios, capaces de mejorar la calidad de vida y fomentar el crecimiento económico.
El Programa de Becas de Educación Terciaria para Estudiantes Indígenas y Afrodescendientes en América Latina ha permitido que miles de estudiantes indígenas y afrodescendientes accedan a carreras universitarias, logrando no solo un avance académico, sino también un impacto cultural al integrar voces diversas en los espacios de toma de decisiones.
Conclusión
La educación superior es una herramienta poderosa que no solo transforma la vida de los individuos, sino que también impulsa el desarrollo económico, social y cultural de los países. Al proporcionar conocimientos y habilidades, abre puertas a mejores oportunidades laborales y fomenta la innovación y el emprendimiento.
Asimismo, promueve la igualdad y la justicia social, formando ciudadanos informados y comprometidos con el bienestar de sus comunidades.
En un mundo en constante cambio, la educación superior se erige como un pilar fundamental para construir un futuro más justo, equitativo y sostenible.
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Bibliografía:
Ariztegi Amaia. (s.f.). Mujeres habitadas que me inspiran: Tererai Trent. La mujer habitada. https://www.lamujerhabitada.com/inspiraciones/mujeres-habitadas-que-me-inspiran/tererai-trent/
Día Mundial del Acceso a la Educación Superior. (2024). Diainternacionalde.com. https://www.diainternacionalde.com/ficha/dia-mundial-acceso-educacion-superior#:~:text=Cada%2026%20de%20noviembre%20se,Educaci%C3%B3n%20Superior%2C%20a%20nivel%20mundial.
La Dra. Tererai Trent es una de las voces más reconocidas internacionalmente en materia de educación de calidad y empoderamiento de las mujeres. (s.f.) Tererai Trent International. https://tererai-org.translate.goog/about-tererai-trent/?_x_tr_sl=en&_x_tr_tl=es&_x_tr_hl=es-419&_x_tr_pto=sc
Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura. (2020). Hacia el acceso universal a la educación superior: tendencias internacionales. https://unesdoc.unesco.org/ark:/48223/pf0000375683
Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura. (s.f.). Educación superior. https://www.unesco.org/es/higher-education#:~:text=Unos%20254%20millones%20de%20estudiantes,los%20pa%C3%ADses%20y%20las%20regiones.
