Cada final de curso, el fracaso escolar es un tema recurrente. A la hora de buscar la causa de este problema, algunos atribuyen la culpa a los maestros o al sistema educativo, otros argumentan que los padres no prestan suficiente atención a la educación de los hijos o que a los niños y niñas de hoy en día: «No les gusta estudiar». Pero, ¿es esto cierto?
En este artículo vamos a explorar con más detalle cuáles son las causas del fracaso escolar, porque creemos que no se trata de buscar culpables, sino de brindar soluciones para conseguir que los pequeños avancen satisfactoriamente en su formación académica.
Hemos de tener en cuenta que el fracaso escolar no es solo una cuestión de calificaciones y de notas, sus implicaciones son mucho más profundas y afectan el desarrollo personal, social y familiar del alumno. Y lo que es peor si cabe: a largo plazo puede comprometer su futuro.
¿Qué es el fracaso escolar?
El fracaso escolar se define como la experiencia educativa en la que un estudiante no consigue completar el ciclo académico obligatorio que le corresponde a su edad.
Esto puede provocar abandono escolar temprano, repetición de cursos, dificultades significativas de aprendizaje y problemas de inserción laboral a medio o a largo plazo.
Ante el fracaso de los niños, padres y educadores debemos recordar las palabras del científico Jean Paul Marat: “No existe el fracaso, salvo cuando dejamos de esforzarnos”, y animar a los niños a seguir intentándolo, porque como decía el maestro japonés Morihei Ueshiba: “Cada error nos enseña algo”.
¿Cuáles son las principales causas del fracaso escolar?
El fracaso escolar puede estar causado por una variedad de factores, incluidos el propio alumno, su entorno, el sistema educativo y los maestros. A continuación, presentamos las causas principales:
- Intelectual: Tanto los niños con problemas de aprendizaje como los de alto rendimiento, así como aquellos que no han alcanzado una base sólida en los cursos anteriores, pueden experimentar dificultades para adaptarse intelectualmente a la escuela.
- Motivacional: aunque el estudiante tenga capacidad para adquirir los conocimientos presentados en clase, hay una falta de motivación que le impide aprovechar estos conocimientos.
- Técnicas de estudio: ocurre en niños que no han convertido el estudio en un hábito y no saben cómo estudiar para conseguir buenos resultados.
- Capacidades emocionales: se trata de niños con problemas en casa, padres sobreprotectores o muy severos, niños hiperactivos, con carencias afectivas o que están pasando por un momento difícil.
- Centro educativo: en ocasiones la organización de clases muy numerosas o las cualidades profesionales y emocionales de los profesores influyen en los resultados del niño.
- Nivel de exigencia: es importante que cada niño se desarrolle en función de sus capacidades y nivel de maduración intelectual, sin infravalorarle con castigos o bajas calificaciones.
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¿Qué hay detrás del fracaso escolar?
En muchas familias, la hora de los deberes escolares se convierte en una verdadera pesadilla: por un lado, hay niños que lloran, se escapan y salen corriendo, porque no entienden la tarea, y, por otro lado, están los que no aguantan ni cinco minutos sentados para realizar sus faenas escolares.
Es importante tener en cuenta que detrás de un fracaso escolar puede haber un trastorno del aprendizaje, como dislexia, dispraxia, disortografía, discalculia, TDAH o precocidad. Para descubrirlo, es necesario la intervención de un equipo multidisciplinar, formado por el docente, el psicopedagogo del centro escolar y, en ocasiones, el neuropsicólogo, quien determinará con exactitud científica a qué se deben las dificultades de aprendizaje que presenta el alumno.
Otras veces, lo que se esconde detrás de un fracaso escolar es algo tan simple como una falta de hábitos de estudio. El niño carece del ambiente adecuado para estudiar, no tiene una pauta horaria, no sabe priorizar temas, trabaja con demasiados distractores cerca, etc.
Estos casos son muy fácilmente solucionables con el asesoramiento adecuado. Existen cursos de fin de semana en los que se enseña a los niños hábitos de estudio básicos, adaptados a su nivel escolar, que les ayudan a organizarse, hacer resúmenes y esquemas, leer rápido, etc.
¿Qué tipos de fracaso escolar hay?
Existen cuatro tipos de fracaso escolar:
- Fracaso escolar primario: aparece en los primeros cursos de escolarización con una falta de atención acentuada, bajo rendimiento, estancamiento respecto a otros compañeros.
- Fracaso escolar secundario: se produce en la etapa de educación secundaria y se relaciona con la falta de motivación, desinterés, abandono escolar, entre otros factores.
- Fracaso escolar circunstancial: se produce por causas externas al alumno, como problemas familiares, económicos, sociales, entre otros.
- Fracaso escolar habitual: se produce cuando el alumno no logra superar el fracaso escolar primario o secundario y se convierte en un patrón repetitivo.
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¿Cómo afecta el fracaso escolar al alumno?
- Consecuencias académicas: implica una pérdida de conocimientos, de habilidades y de competencias que dificultan el aprendizaje y el progreso del alumno.
- Consecuencias psicológicas: El fracaso escolar también afecta a la salud mental del alumno, que puede sufrir estrés, ansiedad, depresión o conductas de riesgo.
- Consecuencias sociales: afecta a la integración social del alumno, que puede sentirse rechazado, marginado o estigmatizado por sus compañeros, sus profesores o su familia.
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¿Cómo ayudar al niño desde la familia?
La familia es un aspecto clave en la educación para evitar el fracaso escolar y un abandono prematuro de los estudios. Los padres deben influir en:
- Mostrar interés y preocupación por su educación, preguntándoles por sus actividades, sus dificultades, sus logros o sus expectativas. Esto les ayuda a sentirse valorados, escuchados y motivados.
- Establecer una comunicación fluida y respetuosa con ellos, expresándoles su cariño, su confianza y su reconocimiento. Esto les ayuda a mejorar su autoestima, su seguridad y su autoeficacia.
- Establecer comunicación con los profesores, informándose de la situación académica de sus hijos, colaborando en las actividades propuestas o solicitando ayuda cuando sea necesario. Esto les ayuda a crear un clima de confianza y colaboración entre la familia y la escuela.
- Fomentar hábitos de estudio adecuados, como tener un horario fijo, un lugar tranquilo, un material organizado o una planificación previa. Esto les ayuda a mejorar su concentración, su memoria y su comprensión.
- Supervisar y orientar el estudio, sin hacerlo por ellos ni presionarlos excesivamente. Esto les ayuda a desarrollar su autonomía, su responsabilidad y su capacidad de resolver problemas.
- Ofrecerles actividades complementarias que enriquezcan su formación, como leer libros, visitar museos, practicar deportes o aprender idiomas. Esto les ayuda a ampliar sus conocimientos, sus habilidades y sus intereses.
- Ofrecerles alternativas educativas que se adapten a sus necesidades, capacidades e intereses, como la formación profesional, la educación a distancia o la educación especial. Esto les ayuda a encontrar su vocación y su futuro profesional.
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¿Por qué afecta más a los niños más desfavorecidos?
El sociólogo francés Pierre Bourdieu abordó el fracaso escolar desde una perspectiva sociocultural. Él sostiene que el sistema educativo favorece a los estudiantes de hogares con mayor capital cultural y social, pero excluye a los estudiantes de entornos desfavorecidos. Según Bourdieu, la reproducción de la desigualdad social es la causa del fracaso escolar.
Por su parte, un informe de Save The Children, a partir del estudio PISA, recoge que el alumnado pobre repite hasta cuatro veces más que el de ingresos altos.
El sistema educativo favorece a los estudiantes de hogares con mayor capital cultural y social, pero excluye a los estudiantes de entornos desfavorecidos
Intervención psicopedagógica
Se procede a hacer intervención psicopedagógica cuando se detectan señales de dificultades académicas o emocionales en un estudiante.
- Evaluación inicial: Cuando un estudiante muestra bajo rendimiento, se realiza una evaluación para identificar las causas subyacentes. Esto puede incluir pruebas de habilidades cognitivas, observación en el aula y entrevistas con el estudiante y sus padres.
- Detección temprana: La intervención psicopedagógica es más efectiva cuando se inicia temprano. Si un estudiante tiene dificultades en una materia específica o muestra signos de desmotivación, es importante intervenir rápidamente.
- Colaboración con docentes y padres: Los psicopedagogos trabajan junto con los docentes y los padres para diseñar estrategias de apoyo. Esto puede incluir adaptaciones curriculares, tutorías o programas de refuerzo.
- Seguimiento continuo: La intervención no es un evento único. Se requiere un seguimiento constante para evaluar el progreso del estudiante y ajustar las estrategias según sea necesario.
Es esencial abordar el problema desde una perspectiva integral, teniendo en cuenta aspectos como el entorno familiar, social y las habilidades académicas del profesorado
Conclusión
El fracaso escolar es un fenómeno complejo que ocurre cuando los estudiantes no logran alcanzar los objetivos y las competencias esperadas.
Ningún niño fracasa en la escuela por voluntad propia. Detrás de su “fracaso” puede haber dificultades de aprendizaje asociadas a algún trastorno del neurodesarrollo que objetivamente les impidan avanzar al ritmo de los demás; problemas familiares o ambientales que no le permitan centrarse en el estudio, o simplemente algo tan sencillo como que carece de unos hábitos de estudio con unas técnicas adecuadas, que le permitan seguir el ritmo académico.
Los niños no suspenden porque quieren, a menudo no pueden o no saben cómo hacerlo mejor
Si tenemos en cuenta que evitar el fracaso escolar es esencial para el bienestar individual y colectivo, ni las familias ni el sistema educativo deberían escatimar esfuerzos para apoyar a los niños más vulnerables a conseguir los objetivos académicos.
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Recursos adicionales:
¿Qué es el fracaso escolar? 2023. Bluecinante. https://www.youtube.com/watch?v=d0JcdtX6f20
Por qué no dar tareas de repaso en vacaciones a los niños y niñas. Deberes de verano | GI Responde. 2022. https://www.youtube.com/watch?v=qgTpUOHDM04
Fuentes:
Educación y Educadores, vol. 18, (2015). Análisis del fracaso escolar desde la perspectiva del alumnado y su relación con el estilo de aprendizaje. https://www.redalyc.org/pdf/834/83443150006.pdf
Informe PISA. (2018) España, segundo país OCDE donde más se repite. https://www.savethechildren.es/publicaciones/informe-pisa-espana-segundo-pais-ocde-donde-mas-se-repite
Mar Romera, pedagoga. El País. (2022) “Los deberes son ilegales. Los niños tienen derecho al juego y al tiempo libre” https://elpais.com/mamas-papas/expertos/2022-09-01/mar-romera-pedagoga-los-deberes-son-ilegales-los-ninos-tienen-derecho-al-juego-y-al-tiempo-libre.html
Pierre Bourdieu. (2017). El poder en el campo de la educación y la pedagogía. Pierre Bourdieu: el poder en el campo de la educación y la pedagogía (redalyc.org)
Save the Childrem. (2018). Informe PISA: España, segundo país OCDE donde más se repite https://www.savethechildren.es/publicaciones/informe-pisa-espana-segundo-pais-ocde-donde-mas-se-repite
